«Hoy no seré provocado».

El estado de ánimo combativo de Oliver Glasner frente a miembros de la prensa alemana no ha mejorado mucho después de su última derrota.

Apenas unas semanas después de que una conferencia de prensa beligerante y antagónica lo dejara hablando sobre los círculos del fútbol alemán, el entrenador en jefe del Eintracht Frankfurt, Oliver Glasner, interrumpió abruptamente otra prensa posterior al partido cuando una simple pregunta de un reportero resultó demasiado para él.

Glasner también interrumpió su entrevista posterior al partido con Sky Alemania cuando su entrevistador preguntó sobre la tarjeta amarilla que haría que Mario Götze fuera suspendido para el próximo partido de liga. El gaffer austriaco acusó al periodista de «intentar provocarme» y luego se fue.

Para el sensible Glasner, seguramente parece que todas las preguntas sobre la situación en declive del Eintracht en la liga están teñidas con la pregunta más importante sobre su futuro. Se ha informado ampliamente que el entrenador SGE tiene una cláusula de salida en su contrato actual y la retirará si Eintracht no se clasifica para Europa.

La clasificación para la Liga de Campeones el próximo año parece cada vez más fuera de la mesa para RheinMain Adler, aunque aún podría ganar un lugar europeo si gana la Pokal. Los hombres de Glasner siguen vivos y bien en la copa nacional, avanzando a las semifinales esta semana.

«Hoy no seré provocado», bromeó Glasner a su periodista posterior al partido. «Ya fue el caso con la entrevista televisiva. La Pascua es una fiesta de paz. Les deseo a todos una feliz Pascua con su familia».

Glasner luego se levantó y se fue.

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